La experiencia de una psicóloga siendo paciente, mi proceso terapéutico

Soy una psicóloga con muchos años de experiencia en el campo de la salud mental. Ayudar a mis pacientes a superar sus problemas emocionales es lo que más amo hacer, pero hace un tiempo, me di cuenta de que yo misma necesitaba ayuda. Me encontraba en una situación difícil a nivel personal: me sentía agobiada y estresada todo el tiempo, me disociaba, procastinaba un montón y no sabía cómo lidiar con mis propias emociones.

Fue entonces cuando decidí buscar ayuda de otra terapeuta y convertirme en paciente. Al principio, fue extraño estar al otro lado del sofá, pero pronto me di cuenta de que hablar con alguien que me escuchaba sin juzgarme era exactamente lo que necesitaba.

Con la ayuda de mi terapeuta, comencé a conectar y descubrir la raíz de mis emociones. Aprendí a identificar mis pensamientos y sentimientos, y cómo manejarlos de una manera más saludable. Trabajamos en mi relación con mi madre, quien siempre ha sido muy invasiva en mi vida, y en cómo establecer límites claros para proteger mi espacio y mi privacidad.

A medida que avanzábamos en mi terapia, descubrí que a menudo me achantaba ante personas muy invasivas, incluso en situaciones profesionales. Juntas, exploramos las posibles causas de este patrón de comportamiento y desarrollamos herramientas para identificar y regular mis emociones en estas situaciones.

También reaprendí técnicas de relajación y mindfulness, y descubrí la importancia de tomarme el tiempo para cuidarme a mí misma. Aprendí a decir «no» cuando era necesario y a no cargar con responsabilidades que no me correspondían.

«Me di cuenta de que había estado llevando un peso que no era mío, y que era importante aprender a dejar ir aquello que no me correspondía»

Con el tiempo, mi terapia me permitió sentir una sensación de alivio y ligereza. Me di cuenta de que había estado llevando un peso que no era mío, y que era importante aprender a dejar ir aquello que no me correspondía. Me siento más conectada conmigo misma y con mis propias necesidades, y estoy mejor equipada para ayudar a mis pacientes a través de sus propios procesos terapéuticos.

🙌 Esta experiencia de ser paciente me ha enseñado mucho. Me ha demostrado que pedir ayuda no es una debilidad, sino una muestra de coraje y de amor propio. También me ha enseñado la importancia del autoconocimiento y la identificación y regulación emocional, habilidades que son esenciales en mi práctica profesional como terapeuta. 🙌

Te animo a que pruebes entrar en este camino, te aseguro que, como a mí, te hará ver la vida de formas diferentes. Tienes la fortaleza necesaria para empezar. ¡Te espero!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Abrir chat
1
Escanea el código
Hola
Muchas gracias por contactar.
¿En qué te puedo ayudar?